Diócesis de Temuco

Obispo Vargas instaló en emotiva eucaristía al Padre Díaz como nuevo párroco de La Merced

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Asimismo al sacerdote,  Oscar Camilla Guerra como Vicario Parroquial.  

[dropcap]T[/dropcap]ras misionar 20 años en la  República de Angola, al sur de África, la Orden de Merced, destinó como nuevo  Cura Párroco de la Parroquia de Nuestra Señora de La Merced, al sacerdote Pedro Juan Díaz Rodríguez, y como Vicario Parroquial, a fray Oscar Genaro Camilla Guerra, ceremonia de instalación, presidida por el Obispo de la Diócesis San José de Temuco,  monseñor Héctor Eduardo Vargas Bastidas.

En la Sagrada Eucaristía los religiosos fueron acompañados en el templo sede  para concelebrar,  por el  Provincial de la Orden en Chile, R. P.  Ricardo Morales Galindo; el Superior del Convento San Ramón Nonato de Victoria y Decano del Decanato de Victoria, R.P, fray Rodrigo  Aguilar Gómez; presbíteros del referido Decanato   ; asimismo,   frailes mercedarios  y  diáconos,   que cobijó a fieles provenientes de las comunidades de base, mapuches y delegaciones de diversas organizaciones de la comunidad, junto a las autoridades comunales.

IGLESIA SERVIDORA

El prelado, en el momento de la Homilía refirió sobre el nuevo pastor mercedario…”El padre Díaz viene de trabajar veinte años en Angola y hablábamos de lo que significa estar allí, en tierras preciosas, con clima distinto al nuestro, con  mucho calor, con sacrificio, entrega, anunciar el Evangelio,  servir a gente de esos lugares, a los pobres, a los más necesitados  y el padre Pedro tiene una experiencia muy hermosa de una Iglesia que es efectivamente servidora”. 

En la Liturgia de la Palabra, Nilda Pichún Morales, tuvo a su cargo la Primera Lectura, tomada de los Hechos de los Apóstoles, y el Salmo 67 “Pueblos de la Tierra, Cantad al Señor”, leído por José Poveda Espinoza.

ENTREGA DE SIGNOS

El Padre Morales  y el Padre Aguilar presentaron el nuevo párroco ante el Obispo y dieron lectura al decreto correspondiente,  para enseguida,  fray Díaz Rodríguez, realizar la profesión de fe y  luego recibir los símbolos principales de su misión: la Santa Biblia, la Pila Bautismal y los Santos Óleos.

En la presentación de los dones, con productos de la tierra, las Orientaciones Diocesanas, la primera piedra de la futura capilla “San Juan Pablo Segundo”, en el sector “Nuevo Horizonte”, en el Bajo Traiguén;   y el Pan y el Vino, fueron presentados por jóvenes de una comunidad indígena e integrantes del Colegio Instituto Victoria y comunidades de base.

El oficio religioso terminó con palabras del nuevo párroco mercedario…expresando que …”el camino hasta aquí, no ha sido fácil, lleno de dificultades, aunque también repleto de alegrías; me refiero al dejar la Misión de Angola. He llegado a Victoria con una maleta vacía que, a cada paso se irá llenado de muchas cosas al compartir  la fe y el trabajo de pastor, encomendado por nuestro  Obispo Héctor”;  igualmente de  un homenaje a su madre por  parte del padre provincial y un ágape servido en el casino del Colegio.

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