“La violencia termina volviendo mentirosa la causa más justa. Por eso decimos ‘no a la violencia que destruye’”.
(Homilía del Santo Padre, el Papa Francisco, en Temuco)
El Administrador Diocesano y la Fundación Instituto Indígena del Obispado de Temuco, lamentan profundamente, la muerte del hermano mapuche, don Juan Segundo Catril Neculqueo, Q.E.P.D., ocurrido el martes 24 de mayo, luego de un atentado contra el minibús de trabajadores forestales, en la comuna de Lumaco.
Ante esta tan grave situación, solicitamos encarecidamente al Gobierno, que tome todas las medidas necesarias y urgentes para realizar una investigación profunda, que permita aclarar la trágica muerte de este hermano que, junto a otros trabajadores, se trasladaba al lugar de su trabajo.
Expresamos nuestras más sentidas condolencias y comprometemos nuestra compañía fraterna en la oración y en la celebración de la Santa Misa, a los familiares, amigos y compañeros de trabajo de don Juan Segundo, en la esperanza que se esclarezca, a la brevedad, este triste y deplorable hecho.
Finalmente, rechazamos de forma categórica todo tipo de violencia y reiteramos el urgente llamado a la búsqueda permanente de todos los caminos que conduzcan a un verdadero diálogo, para lograr la paz y la justicia en nuestra querida región de La Araucanía.
“…Les dejo la paz, les doy mi paz. La paz que yo les doy no es como la da el mundo. Que no haya en ustedes angustia ni miedo…” (Jn 14, 27)
Pbro. Juan Andrés Basly Erices
Administrador Diocesano
Diócesis San José de Temuco
Arturo Hernández Sallés
Presidente Fundación Instituto Indígena
Comunicado-Publico-Diocesis-de-Temuco-25-mayo