La Solemne Eucaristía de Acción de Gracias por la Patria, con el tradicional Te Deum, fue presidida por el Pbro. Juan Andrés Basly Erices, Administrador Diocesano de la Diócesis San José de Temuco, en el Templo Catedral, celebración a la que asistieron además las más altas Autoridades Civiles, Judiciales, Religiosas, Militares y de Orden Público y Seguridad, para agradecer y pedir a Dios por la patria y su gente, celebraciones que también fueron realizadas en todas las parroquias de los cinco decanatos.
La jornada del 18 de septiembre, se inició con el toque de Kul-Kul, instrumento ancestral, que resonó en la Iglesia Catedral, para convocar a esta solemne celebración, rito que estuvo a cargo del Lonko Víctor Tralma Millapi.
Luego, la Banda Instrumental, del Destacamento de Montaña Nº 8 “Tucapel” de Temuco, interpretó el Himno Nacional frente a nuestros emblemas patrios, coreada por todos los asistentes.
Liturgia de La Palabra
La primera lectura, la proclamó el Señor Raúl Caamaño Matamala, Profesor de la Universidad Católica de Temuco y miembro del Consejo para la Prevención y el Abuso de nuestra Diócesis y la segunda lectura, estuvo a cargo por el Señor José García Ruminot, Senador de la República. El diácono Víctor Burgos, hizo lectura del santo Evangelio.
En su homilía, el Padre Juan Andrés Basly, al iniciar sus palabras, recordó a quien fue nuestro Pastor, » Quisiera hacer memoria agradecida por quien fuera nuestro obispo diocesano, Mons. Héctor Vargas Bastidas, a quien hace seis meses el Señor lo llamó a participar de su Pascua. Fue monseñor Vargas quien, los últimos nueve años, presidía este Solemne Te Deum en esta Iglesia Catedral. Hoy damos gracias a Dios por su testimonio, su valentía, su entrega generosa como Pastor en esta Iglesia de la Araucanía».
Manifestó que » Ante el Altar del Señor, inspirados por su Palabra, ponemos una vez más la vida de nuestro amado pueblo, en la confianza, que no siempre hemos experimentado, Él colmará nuestras esperanzas (…) Elevamos este canto de alabanza, en este día domingo, Día del Señor, cuando aún estamos marcados por esta larga pandemia, que tanto sufrimiento nos ha traído, en todo orden, y por cierto, lo más grave y doloroso, como es la pérdida de innumerables vidas humanas».
Expresó su cercanía y consuelo a tantas familias que han perdido a sus seres queridos, tanto en la pandemia, como en los actos de violencia que se han vivido repetidas veces a lo largo de nuestro país.
Gente de nuestra patria
El Pbro. Juan Andrés Basly, reiteró su gratitud y reconocimiento a muchos compatriotas que con el esfuerzo de cada día, trabajan por un Chile mejor, y que han ido sembrando la semilla de la esperanza, «Me refiero a los profesores, que pese a las limitaciones y al estrés, han sido notablemente generosos, no bajaron nunca los brazos, y no dejaron nunca de buscar los medios para cumplir con su delicada misión (…) Al personal de salud, a las fuerzas de orden y seguridad, a los funcionarios públicos y particulares de tantas instituciones, que cumplen roles imprescindibles para la tranquilidad de la población. A todas y todos quienes desde el espacio que les correspondía, supieron asumir con responsabilidad su propio servicio al bien común, pese a las dificultades y las graves limitaciones en que hemos debido vivir. A todos, gratitud, reconocimiento, e imploramos de Dios el regalo de su bendición».
Reiteró en señalar que » En este aniversario afirmamos con convicción que Chile somos todos quienes habitamos en esta tierra bendita, que para construir la patria nadie debe omitir su contribución y nadie debe ser olvidado en sus necesidades fundamentales».
Una mesa para todos
Profundizó en la fraternidad de nuestra gente: » Este mes de septiembre lo vivimos haciendo memoria de nuestra historia patria, tradiciones y costumbres que nos alegran, y nos hacen más hermanos y hermanas y nos permiten fraternizar en nuestras familias, lugares de trabajo, entre chilenas y chilenos, como también con los hermanos provenientes de otros países, hermanos que han hecho de Chile su segunda patria. En este aniversario patrio, les renovamos el anhelo de construir con ellos una gran nación de hermanos, una mesa para todos (…) Todos y todas importan, somos un solo Pueblo, Mapuches – Chilenos».
Recordó a lo planteado por monseñor Vargas, quien decía que: “Hablar de reconocimiento, implica consolidar las bases democráticas de nuestro país, subsanando un pecado de omisión, por un país que secularmente que ha venido eludiendo esta deuda de raíces históricas, también aquí ha faltado el Estado».
Fue enfático en expresar que los chilenos y chilenas que, por generaciones, han labrado la tierra, construido ciudades, escuelas y hospitales, que han tejido ese entramado de instituciones que están destinadas a resguardar el bien común, «Todos ellos formamos parte de hermosa patria que es Chile».
Dignidad humana
Llamó a reflexionar en torno a las lecturas, sobre el acontecer cotidiano como Administradores: «La primera lectura del profeta Amós, nos invita a la recuperación de la dignidad humana, en medio de una cultura que ha instrumentalizado a las personas, así como su forma de pensar (…) Esta es también la situación de nuestro tiempo, el profeta deja claro que es necesario recuperar la dignidad humana, recuerda que los valores y la conciencia no son negociables, las cosas se compran y se venden, las personas no, las personas se respetan (…) Esta misma realidad es puesta en evidencia, en el Evangelio según San Lucas, cuando Jesús valiéndose de una parábola, muestra la radiografía del ser humano desde la perspectiva de las tinieblas y no desde la perspectiva de la luz».
Expresó que cuando el hombre se aparta de Dios, y lo quiere desterrar, sacarlo de su camino, sacarlos de las leyes, » Ya sabemos las consecuencias, nace la violencia, las guerras, las injusticias, aparecen las drogas y toda clase de desórdenes, de los cuales estamos siendo testigos, hoy, en el mundo, en nuestra patria, y aquí, en nuestra querida Araucanía (…) Gran parte de la sociedad, particularmente las víctimas, experimentan una sensación de abandono, desamparo y falta de Estado. Lamentablemente, tampoco nuestra Región ha escapado de esta tragedia y sus dolores. La ambición y el egoísmo ciegan el corazón humano a la gracia de Dios y producen injusticias, las cuales desatan una larga lista de males sobre la tierra (…) Por eso le pedimos de corazón a Dios, que en este día nos regale el don de la paz. Lo pedimos para nuestro pueblo, nuestra región y para el mundo entero, poder vivir en paz. ¡La violencia nunca será el camino para superar nuestras diferencias y desencuentros! Por ello, rezamos como nos enseñara San Francisco de Asís: “¡Señor, haz de mí un instrumento de tu paz!” y “artesanos de paz” como lo dijo el Papa Francisco en visita a la Araucanía, los invito a pensar juntos, escuchar los gritos de la Araucanía, que por años nos interpelan».
Continuó sus palabras sobre la realidad de la sociedad, diciendo: » La gente está cansada de escuchar palabras vacías, sin fundamento, que no buscan caminos de solución, sino que ven constantemente discusiones inútiles abogando por sus propios intereses partidistas, eso cansa y agota la vida del pueblo. Eso lo vemos muy claro en el administrador del Evangelio, que no tuvo compasión con su colega(…) Por tanto, las autoridades están llamadas a responder con sabiduría y a la altura los desafíos que le plantea hoy la ciudadanía. El pueblo se ha pronunciado una vez más», en relación al último plebiscito.
Concluyó su homilía, manifestando su gratitud profunda a Dios por el don de nuestra vida, la de nuestros seres queridos y de personas cercanas que amamos, » La vida, así la apreciamos delante del Señor en este día, es un don precioso y sagrado. Por ello, siempre y en toda circunstancia, debe ser nuestro propósito de respetarla desde su concepción y hasta su término natural (…) Nosotros, los cristianos, al contrario, debemos darle gracias a Dios por la inteligencia que nos ha dado, por los múltiples dones y carismas que tenemos, que a propósito no han de ser para guardarlos, sino para ponerlos al servicio de los demás».
Rogativa del Pueblo Mapuche
Seguidamente, la Oración Universal, la introdujo con esta oración: “ponemos a Chile en las manos del Señor de la vida y de la historia, para dar gracias y pedir bendiciones para sus hijos e hijas».
El Presbítero Ariel Valdez Opazo, Vicario Pastoral de la Diócesis San José de Temuco, hizo oración por la Iglesia. El Señor Raúl Allard Soto, Delegado Presidencial Regional de La Araucanía, realizó oración por nuestra Región. La Señora María Isabel Mariñanco Nahuelcura, Secretaria Regional Ministerial de Educación, pidió por el mundo político. El Señor Jaime Huenchuñir Vergara, Presidente de la Confederación Económica Mapuche, oró por el mundo empresarial y del trabajo.
El Matrimonio, conformado por el Señor Aliro Bórquez Ramírez, Rector de la Universidad Católica de Temuco y la Señora Clara Vildoso Cortez, efectuaron oración por las familias y la educación.
Hermanos Migrantes, de las Comunidades de Venezuela y Colombia, rezaron por los Migrantes y Refugiados y el Jefe de la Macrozona Sur, de Control, Orden Público e Intervención, General de Carabineros, Señor César Bobadilla Pinilla, efectuó oración por las Fuerzas Armadas, de Orden y Seguridad Pública.
Posteriormente, se realizó una rogativa del Pueblo mapuche, instancia donde Don Víctor Tralma Millapi, Diácono de nuestra Diócesis y Lonko de la Comunidad Juan Pedro Huircan de Curaco, junto a miembros de dicha comunidad, y de las localidades de Puerto Saavedra y Carahue, pertenecientes a las Parroquias Nuestra Señora del Carmen de Chol-Chol y San Pablo de Carahue, efectuaron rogativa de Acción de Gracias por nuestra patria y por nuestra región.
Ofertorio
Se presentaron ante el Altar del Señor, la historia, las tradiciones y la vida, de todos quienes habitamos esta hermosa Patria, por ello y en unión de este tiempo de Sinodalidad, un grupo de representantes que asistirán a la III Asamblea Nacional Eclesial, y que pertenecen a las diversas vicarías y áreas de nuestra diócesis, presentaron algunos signos.
El Padre Ariel Valdez, Vicario Pastoral, presentó el informe de discernimiento diocesano, fruto de la reflexión de las diversas parroquias, comunidades, vicarías y áreas pastorales de la diócesis.
El Hermano Juan Carlos Alcoholado, del Instituto de los Hermanos de las Escuelas Cristianas De La Salle, por la Vicaría de la Educación, presentó el Logo Sinodal, signo del trabajo encargado por el Santo Padre.
Los cirios, fueron presentados por representantes de las vicarías y áreas pastorales, Delia Coña, de la Vicaría Para la Pastoral Mapuche y Rural Campesina; Maicol Saavedra, de la Vicaría de la Juventud; Eliana Suárez, de la Vicaría de Acción Social; María Eugenia Contreras, del Área de Formación Pastoral; Catalina Valenzuela y Alejandra Rivera, Delegadas Diocesanas para la Asamblea Nacional. El Pan y el Vino, fueron llevados al Altar, por el Señor Luciano Rivas Stepke, Gobernador Regional de La Araucanía y su Esposa, Señora Verónica Brebi Leal.
Al finalizar esta celebración de Acción de Gracias, fue interpretado el Himno del Te Deum, luego, el Administrador Diocesano, impartió la bendición sobre las autoridades y asistentes.