Escribe: Mons. Jorge Concha Cayuqueo, OFM, Obispo Diócesis San José de Temuco
Este domingo, la Iglesia Católica celebra la Solemnidad de la Ascensión del Señor, en que Jesús Resucitado vuelve al Padre y les deja a sus discípulos la tarea de comunicar la Buena Noticia que es Él y la vida que ofrece.
Esta fiesta nos recuerda cómo hoy los cristianos continuamos la misión de Jesús; Él hoy se hace presente a través de las palabras, actitudes y acciones de sus discípulos. De manera especial, recordamos a los Catequistas, que con su generosidad y testimonio nos han ayudado y nos ayudan a crecer en la comunión con el Salvador Jesús.
Agradecemos como Iglesia, la labor de tantos hombres y mujeres, que a lo largo de la historia han sido esos testigos que, desde su experiencia y formación, nos han ayudado en el camino de la fe. Vaya a los catequistas de ayer y de hoy, mi reconocimiento.
En el contexto de esta celebración de la Ascensión del Señor, el Santo Padre nos ha convocado a la 58ª.Jornada Mundial de Comunicación Social, cuyo mensaje fue publicado para la fiesta de San Francisco de Sales, patrono de los periodistas y comunicadores, bajo el título “Inteligencia artificial y sabiduría del corazón: para una comunicación plenamente humana”.En este mensaje, el Papa Francisco invita a recuperar la sabiduría del corazón, redescubriendo el camino de una comunicación plenamente humana, donde debemos reconocer nuestra condición de creaturas y nuestro vínculo social y así, unidos, crecerá la capacidad de discernir y vigilar. Al hablar de los sistemas de inteligencia artificial invita a que puedan “contribuir al proceso de liberación de la ignorancia y facilitar el intercambio de información entre pueblos y generaciones diferentes”, donde cada ser humano tenga una capacidad crítica de la misma comunicación.
Finalmente, tanto el 10 de mayo como el segundo domingo del mes de mayo, celebramos el Día de la Madre, y me uno al Papa Francisco en Amoris Laetitia (n.174): “Queridísimas mamás, gracias, gracias por lo que sois en la familia y por lo que dais a la Iglesia y al mundo”.