El Pbro. Ariel Valdez Opazo, Asesor General de Pastoral UCT, se refiere en la columna dominical publicada en el Diario Austral, a las misiones de verano que se realizaron los jóvenes en el sector parroquial de San Pedro de la comuna de Curacautín.
Desde el día 07 al 15 de enero de 2023 se vivieron las Misiones de Verano en la ciudad de Curacautín, actividad organizada por la Pastoral de la Universidad Católica de Temuco en conjunto con la Pastoral de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. En total, los equipos fueron conformados por 28 jóvenes uniéndose a este grupo misionero miembros funcionarios y académicos de la UCT comprometidos con la vivencia del sello católico de nuestra institución.
Los misioneros fueron recibidos el viernes 6 de enero en el campus San Juan Pablo II, dándoles una cálida bienvenida junto al Vice Gran Canciller Pbro. Patricio Trujillo, quien presidió la Eucaristía de inicio. El mismo día 06 de enero los jóvenes tuvieron actividades donde se fortalecieron los lazos personales y comunitarios, en ese contexto también se profundizó en la formación de los misioneros con respecto a las actividades a realizarse durante el tiempo de misión.
Nuestros jóvenes misioneros viajaron a Curacautín el día 07 de enero y tuvieron la posibilidad de visitar familias en sus hogares, también se realizaron actividades para niños y adultos mayores, celebraciones litúrgicas y trabajo voluntario, todo esto fue surgiendo de acuerdo a las necesidades de las comunidades y familias visitadas, como también desde la vocación misionera universitaria impulsada por el encuentro personal con Cristo.
La Misión de los jóvenes de nuestra UCT y PUCV, van en respuesta al llamado del Papa Francisco a la Sinodalidad, concepto que orienta a la iglesia a vincularse, a tener un acercamiento con la comunidad, a hacer un camino juntos en la fe. En ese contexto, Efraín Sáez director general de Pastoral UCT, señaló, “la sinodalidad implica salir y conectarse con el entorno, con las personas que más necesitan. Los jóvenes en misiones de verano salen a compartir y a ser ese rostro vivo de la iglesia que sale al encuentro, viviendo su espiritualidad a través del servicio”.
Las misiones en conjunto entre ambas universidades es un hermoso y profundo proyecto de vinculación que espera permanecer a lo menos tres años, dónde las actividades misioneras se irán experimentando alternativamente entre la diócesis de Temuco y la de Valparaíso, respondiendo a las necesidades sociales y espirituales de ambas regiones y diócesis.
Los misioneros agradecen al Pbro. Mario Ross párroco de la P. “San Pedro” y a su comunidad, a las UCT y PUCV y a todas las personas que de una u otra forma hicieron posible la misión. Gracias por su hospitalidad, calidez y cariño durante estos días de misión. Que el Señor les bendiga y confiemos a Dios los frutos de esta misión.