El sábado 04 de Mayo, se celebró la Toma de Posesión del nuevo párroco, el Pbro. Juan Leonelli Leonelli, de la parroquia Nuestra Señora del Carmen de Chol Chol, que pertenece al decanato de Imperial, ceremonia que fue presidida por Monseñor Jorge Concha Cayuqueo, OFM, obispo de la Diócesis San José de Temuco, junto al Pbro. Rodrigo Aguilar Gómez, encargado diocesano de Liturgia y párroco de Jesús de la Misericordia de Labranza junto a los diáconos Petronilo Gutiérrez Ibáñez, Víctor Tralma Millapi, Dorian Cánovas Mellado y Juan Gerardo Ross Contreras.
Antes de dar inicio al rito de instalación con la comunidad, el Padre Leonelli realizó una emotiva ceremonia de profesión de fe y juramento de fidelidad, acompañado por los miembros del consejo pastoral y agentes pastorales, a un costado de la parroquia.
Durante este momento, la señora Rita Sandoval, una destacada miembro de la comunidad con 87 años de edad, compartió una conmovedora reseña histórica de la parroquia, reflejando décadas de dedicación al servicio de la iglesia junto con su familia.
En la ceremonia el Padre Leonelli, arrodillado ante la Santa Cruz, realizó el solemne juramento. Posteriormente, en el Templo Parroquial y en compañía de la comunidad, tanto de la parroquia Anunciación de Temuco como de los fieles de Nuestra Señora del Carmen, se dio inicio a la ceremonia de Toma de Posesión. Comenzó con la lectura del decreto por parte del Pbro. Rodrigo Aguilar Gómez, luego, la señora Erna Beltrán, miembro del consejo pastoral, dio la bienvenida al nuevo párroco y presentó la parroquia. Finalmente, don José Pérez, animador de la comunidad rural San Francisco de Rapahue, junto con su hija, entregaron la casulla al Padre Juan Leonelli.
Durante la homilía, Monseñor Jorge Concha Cayuqueo, OFM, destacó la importancia de la llegada del Padre Juan a la comunidad y mencionó: «El padre Juan viene a sumarse al camino que ya ha recorrido la comunidad, con altos y bajos, porque así es nuestra vida también». Luego, el obispo entregó al nuevo párroco los signos y lugares litúrgicos significativos, como las llaves del templo, la fuente bautismal y la sede, instándole a ser imagen de Jesucristo y a predicar su evangelio.
Al finalizar la Santa Misa, el Padre Juan se dirigió a la comunidad expresando su deseo de acompañar a cada uno en su camino espiritual y de ayudarles a descubrir el llamado del Señor en sus vidas, destacando que la iglesia somos todos y que juntos forman una comunidad unida en la fe.
Corresponsal: Anyela Millapan