Al atardecer del viernes 17 de marzo, la Diócesis San José celebró su fiesta patronal, con la presencia de muchos sacerdotes, -quienes concluían días de retiro espiritual-, compartieron además junto a diáconos, la Eucaristía que presidió monseñor Alberto Lorenzelli Rossi, obispo auxiliar y Vicario General de la Arquidiócesis de Santiago.
Se inició la solemnidad, agradeciendo por el nombramiento de Monseñor Jorge Concha Cayuqueo, como Obispo de nuestra Diócesis, por quien se oró por su ministerio fecundo.
Monseñor Lorenzelli, destacó en su homilía el reflejo de la paternidad de Dios, en San José, “Es el Padre que, desde toda la eternidad, engendra la Palabra que es Dios, que está en Dios. El Padre que en la plenitud de los tiempos hace partícipe de esta paternidad suya a José al cual le llamaremos Padre; no padre según la carne, Padre según la promesa.”
Resaltó que: “San José, un hombre justo, así lo define el Evangelio, es aquel que está abierto a Dios, comunión de amor, así lo dice la Sagrada Escritura, “es la persona que sabe ver con asombro la acción de Dios en su vida y en el mundo. Es justo, es la persona que respeta el designio divino, la voluntad divina y acoge reverente las exigencias del plan de Dios. Es San José, un hombre tan justo, que no quería revelar el misterio de María. Al ser un hombre de Dios, descubre que el Señor está obrando algo grande y maravilloso en la vida de su esposa María (…) Nuestro santo, es respetuoso de los planes de Dios y porque hasta ese momento no tiene señal alguna que Dios quiere que tome parte activa en la obra de la reconciliación, San José decide alejarse respetuosamente. Pero apenas Dios lo hace saber en sueños que quiere que él tome parte activa en su plan de salvación, San José será el hombre obediente que se abre a las exigencias del plan de Dios con absoluta generosidad para custodiar a María y al Verbo Eterno, ya vivo y presente en el vientre virginal de su esposa”.
Puntualizó en este modelo a seguir, “En este día, vemos el gran ejemplo para todo padre llamado a amar con ternura y dedicación a su esposa, y a custodiar el don sagrado de la vida de sus hijos desde su concepción y, luego acompañar su crecimiento saludable a lo largo de las diversas etapas de su vida, tanto en lo humano como en lo divino”.
Al concluir la ceremonia, jóvenes de la Vicaría de la Juventud, presentaron ante la imagen del santo patrono San José, un cirio y un arreglo floral, como gesto de agradecimiento por su protección e intercesión.
Que, en este tiempo de Cuaresma, San José, nuestro santo patrono, nos proteja y colme de bendiciones, a su pueblo y al nuevo pastor, monseñor Jorge Concha Cayuqueo, que en las próximas semanas asumirá e inicia su peregrinar en estas tierras de La Araucanía.