Diócesis de Temuco

Dedicación Templo San José de La Costa de Trovolhue

La celebración se inició con la procesión que se congregó desde a plaza del pueblo, donde alrededor de 500 personas junto a monseñor Héctor Vargas Bastidas, Obispo de la Diócesis San José de Temuco, presbíteros, diáconos, animadores y fieles, con cantos de alabanzas caminaron hasta la parroquia, donde un grupo de diáconos portaba reliquias de  San Pío de Pietrelcina las que serían depositadas en el Templo.

Congregados fuera de la iglesia, monseñor dirigió unas palabras al pueblo; luego, tres representantes de los trabajadores de la obra le entregaron las llaves del nuevo edificio, con las que el obispo abrió las puertas e invitó a ingresar en la Iglesia: “Entrad por las puertas del Señor con acción de gracias” mientras el coro Catedral entonaba el himno Sumo Dios.

Terminado el rito de entrada, el obispo bendijo el agua, para rociar al pueblo en señal de penitencia y en recuerdo del bautismo, y para purificar los muros y el Altar de la nueva Iglesia.

Tras la lectura del Evangelio, monseñor Héctor en su homilía señaló: “Estamos muy contentos de poder celebrar la Eucaristía por primera vez en este nuevo Templo del cual ya se han dicho en la Liturgia de inicio y en las afueras del Templo, las palabras suficientes. Todos estamos conscientes de cómo se llegó a esto y estamos todos también conscientes de los esfuerzos, los trabajos, los sacrificios y también la solidaridad tan grande que hemos recibido, para poder tener una casa digna en donde encontrarnos con el Señor, dejarnos querer por él, compartirle nuestros sentimientos, abrirle nuestro corazón y nuestra vida y sentirnos que estamos en casa, en la presencia del Dios de la vida”.

“La hermosura del Templo, tiene que reflejar eso, el Templo debe ser el signo de lo que es la comunidad cristiana, una comunidad unida en el amor, una comunidad que quiere vivir, sirviendo y amando a los demás y al Mundo como su Señor lo hizo, mientras estuvo entre nosotros. Por lo tanto, mi augurio es ése, justamente que este Templo sea el signo de una comunidad que se transforma en el Cuerpo de Cristo y en su condición de tal, sirve a la sociedad, a los demás, a Trovolhue y las comunidades que conforman el territorio parroquial. Todos los seres humanos somos hijos de Dios y entonces queridos hermanos, no nos olvidemos nunca de eso, este Templo debe reflejar esto”.

Puntualizó en señalar que: » la Doctrina dice y el apóstol Pablo con tanta claridad, que efectivamente, el verdadero templo, está hecho de piedras vivas, es decir, nosotros, el verdadero templo está hecho de piedras vivas, cuyo fundamento, cuya piedra angular, cuya piedra fundamental , sobre la cual se afirma todo el edificio, es Cristo, el Señor, simbolizado en el Altar. El Altar es Cristo, Jesucristo es en la Eucaristía y en la celebración de la Eucaristía, Jesucristo es al mismo tiempo, el sacerdote, el sacrificio y el altar. Entonces eso nos recuerda Cristo, la roca fundamental sobre la cual se afirma todo el edificio, el templo material y el templo espiritual que somos nosotros”.

Recordó que: «no debemos olvidarnos que el templo vivo de Cristo, en no pocas ocasiones sufre, sufre en el cuerpo de todos aquellos que están al borde, que han quedado abandonados, que han quedado tumbados al borde de los caminos de la vida, por tantas razones, entonces ahí el Cuerpo de Cristo sufre y eso despierta entonces la solidaridad de todo el resto del cuerpo, del resto del cuerpo vivo, por lo tanto, no nos olvidemos nunca de todos estos significados.

Por último queridos hermanos y hermanas, no deja de ser hermoso que con la construcción  de este Templo, la bendición del Sagrario y la instalación de Jesús Sacramentado en él, nos hace ver de que El quiere compartir nuestra vida y quiere compartir nuestra historia. El con esto, nos dice que El pone su tienda entre nosotros. El Señor levanta su tienda en medio de las tiendas nuestras donde vivimos todos los días. El viene y se instala en medio de su pueblo para amarlo, para servirlo, para escucharlo, para animarlo, para defenderlo del maligno. El Señor entonces también construye su casa entre las nuestras para decir de que El estará siempre, todos los días en medio de nosotros para servirnos y lavarnos los pies; para alimentarnos de su Cuerpo y de su Sangre que nos da la vida y para sanar nuestras heridas y enviarnos en misión”.

Concluyó sus palabras, dando las gracias por todo esto en la memoria del Padre Pedro Pablo Contreras“. Qué hermoso recordarlo, qué hermoso de que  la memoria continúe, respecto de este sacerdote, que en su minuto tanto hizo por Trovolhue, cuando se inició este pueblo, este sacerdote ahí , en medio de ellos, compartiendo tantas esperanzas a la gente, pensando en un futuro de prosperidad que vendría y así también un homenaje a todos los párrocos que han pasado por aquí hasta el actual, el padre Patricio Gutiérrez, llegó no hace mucho y miren como vamos viendo los frutos de su entrega sacerdotal y pastoral en medio de ustedes.

Igualmente un reconocimiento a todos aquellos laicos y laicas, hermanos y hermanas agentes pastorales que también desde el día uno de la historia de esta parroquia han servido, han trabajado, se entregan todos los días y de una manera tan generosa y este es el momento para darles gracias de corazón a todos ellos por su hermoso testimonio de vida cristiana”.

Luego de las palabras del obispo, fue la Oración de Dedicación y la Unción del Altar con el Santo Crisma, que recuerda la acción del Espíritu Santo que hace y asocia este nuevo Altar y Templo, a Cristo mismo, piedra verdadera del eterno Sacrifico Redentor.

Tras concluir el canto la oración de las Letanías, el párroco Patricio Gutiérrez se dirigió frente al Altar para depositar las reliquias de San Pío de Pietrelcina. A continuación, fue la unción del Altar y de los muros de la Iglesia. Luego, de iluminar el Altar y la Iglesia, se inauguró la capilla del Santísimo Sacramento.

TESTIMONIOS

“Para mí es un gran sueño de tener la construcción de nuestro templo, que con tanto sacrificio se ha logrado gracias a Dios; También el puerta a puerta de la comunidad de la gente que aportaron muchos recursos, nos unimos todos a esta causa”. Pedro Damián Leal Fonseca, CEB Pedro Pablo de Trovolhue.

“Para nosotros, el Templo Parroquial, es la casa de nosotros, la casa de todas las comunidades, eso es lo que luchamos y trabajamos para obtener. Es que por muchos años se ha luchado por esto y que haya salido ahora es importante para nosotros, como comunidad y como católicos”. Nelson Retamal, Animador CEB Pichinhual.

“Mucha alegría para nosotros, como cristianos católicos, estamos muy contentos de ver este sueño, de tener un Templo nuevo, y bueno hemos venido preparándonos de hace tiempo, desde que comenzó la construcción. Y ahora es alegría de ver que no en tanto tiempo ya está este sueño hecho realidad, gracias a Dios.”Marcia Ulloa, Animadora CEB San Francisco de Asís de Pullangue.

“Es un momento, primeramente muy solemne porque se consagra el nuevo templo donde renovamos lo que nos dejó nuestro fundador, como decía el animador en sus palabras. Don Pedro Pablo Contreras Sepúlveda, fundador yo diría, de la Iglesia Católica aquí en Trovolhue y refundador del pueblo mismo: Nueva Trovolhue. Así que muy contentos y darle gracias a Dios por la solemnidad de este día que nos ha regalado y a nuestro Obispo Monseñor Héctor Vargas Bastidas, todos los sacerdotes diocesanos que nos acompañan, diáconos y jóvenes religiosos y todos nuestros invitados especiales, las autoridades comunales y también la comunidad parroquial entera.

Llevo, casi no me atrevo a decirlo, pero arriba de 53 años dirigiendo esta barca, desde el año 75 hasta el año 98, cuando llegó un sacerdote para empezar a preparar los cimientos de la nueva parroquia de nuestra Diócesis San José de Temuco, la parroquia San José de Trovolhue.

De todas maneras, tenemos la gratitud en nuestro corazón y a flor de labios, para nuestro Pastor, para nuestro Obispo Diocesano, Monseñor Héctor Vargas Bastidas, que como también decía el animador en sus palabras, se empeñó por hacer realidad esto que de tantos años que veníamos, de cambiar ya el Templo que teníamos de tablitas  nada más, pero gracias a la bondad de nuestro señor Obispo Diocesano, ahora tenemos el nuevo Templo y lo estamos pasando a consagrar”. Dino Flores Muñoz

“No a nosotros, Señor, no a nosotros. A tu Nombre sea la gloria”. Damos gracias a Dios por aunar tantas y distintas voluntades, coincidiendo todas en solidarizar con la construcción de este Templo. A este mismo Dios suplicamos que su bendición siempre abundante, derrame gracias sobre todos aquellos que hicieron posible esta Casa para Dios”. Pbro. Patricio Gutiérrez, Párroco de San José de La Costa de Trovolhue.