Ante la dramática situación que viven cientos de ciudadanos bolivianos que quedaron varados en nuestro país debido a la crisis sanitaria generada por el Covid-19 y la negativa inicial de Bolivia a recibirlos, la Red Clamor Chile se articuló para generar acciones en su apoyo.
La emergencia originada por el Coronavirus afecta sobre todo a los más vulnerables, entre ellos un grupo de más de 700 migrantes bolivianos, quienes enfrentan una situación de precariedad aún mayor, luego de ser despedidos de los trabajos que desempeñaban en nuestro país. Al estar imposibilitados de retornar a sus hogares, como consecuencia de las medidas adoptadas por la nación Boliviana, un numeroso grupo se encontraba pernoctando en las afueras del consulado.
Ante esta situación, algunos de los organismos miembros de la Red Clamor, tales como el Instituto Católico Chileno de Migraciones (INCAMI), el Arzobispado de Santiago, la Vicaría Pastoral Social, la Pastoral de Movilidad Humana, el Servicio Jesuita Migrante y Caritas Chile, iniciaron acciones para ir en su apoyo. Entre las medidas adoptadas para ir en ayuda de estos migrantes bolivianos, se han dispuesto como lugares de acogida los recintos de la Parroquia Latinoamericana – INCAMI, la casa de retiro Sagrada Familia, ubicada en la comuna de La Cisterna y la parroquia Santa Cruz.
En horas de la tarde, se informó que las cancillerías de Chile y Bolivia acordaron que los ciudadanos de ese país cumplirán una cuarentena de 14 días en Iquique, para luego ingresar a su nación de origen. El primer grupo viajará al norte de país esta noche, así lo confirmó el vicepresidente Ejecutivo de INCAMI, Lauro Bocchi: “Son más de 770 personas las que hemos acogido en la parroquia italiana y a las que estamos apoyando. La idea es que comiencen el viaje de retorno durante esta noche en varios buses rumbo a Colchane. Es una experiencia muy dura, muy fuerte, hay mujeres embarazadas, niños, una persona enferma con cáncer. Es muy emocionante ver esta situación”.
El objetivo propuesto por la Red es generar una acción conjunta respecto de la ayuda que podría entregar la iglesia a las familias extranjeras que están en Chile. Esto es en lo urgente: alimentación, un techo para que pasen la noche y en una acción paralela, orientación legal para que regularicen su condición laboral y posible acceso al seguro de cesantía.
Al respecto Lorenzo Figueroa, Director de Caritas Chile, señaló: “Esto es un nuevo llamado de atención sobre lo que están viviendo las comunidades migrantes, especialmente en tiempos de pandemia. Estamos llamados a focalizar nuestro trabajo en los grupos más vulnerables para que todos cumplamos con cuidarnos los unos a los otros”.
La Red Clamor está realizando un levantamiento sobre la realidad de las comunidades migrantes en Chile, lo cual será analizado en el encuentro que se realizará en los próximos días.
Fuente: Comunicaciones Pastoral Social Caritas