Hna. Yustina Intan ( Juniora), Congregación de las Hermanas Misioneras Siervas del Espíritu Santo
[dropcap]E[/dropcap]l 15 de Agosto, es el Día de la Asunción de la Virgen María, fecha donde en esta oportunidad queremos compartir un testimonio de amor y entrega de una misionera de Indonesia, que hace más de un año trabaja en la parroquia La Anunciación del Señor, de la ciudad de Temuco, acompañando a la comunidad en diversas labores pastorales.
“Soy muy feliz, Dios siempre me ha acompañado, creo que nací con la vocación de religiosa. Fue en el año 2012, cuando la Hermana Superiora Provincial, me comunica que mi destino sería Chile, para mí era un gran desafío porque no sabía hablar español y recuerdo que le dije que me diera un tiempo para reflexionar, fue una semana y tras eso le dije, voy donde el Señor quiera y bueno, aquí estoy muy feliz y agradecida.
Son tres años que la Congregación me envía a misionar, esto es un desafío constante y muy enriquecedor, donde he tenido la oportunidad de trabajar con niños y jóvenes. También, soy voluntaria en el Hogar de Ancianos Nuestra Señora del Carmen, donde he aprendido mucho español, porque los ancianos me están ayudando cada día.
Me gusta este país, su gente, quiero ayudar, fue así que vine a Fundación CARITAS para preguntar qué necesitan como voluntariado y me dicen que hay una Residencia que está la gente en situación de calle y ahora yo trabajo con ellos. Creo que la realidad es desafío y que el Señor está siempre presente, la misión no es algo fácil es hacer totalmente la voluntad de Dios, escuchar su voz y después entregar el amor que yo recibo del Señor a los demás.
Hace dos años que no veo a mi familia, pero la gente en Temuco es muy cariñosa y buena, me dan mucho amor, la vocación es escuchar la voluntad de Dios.”