Diócesis de Temuco

Justicia, reparación y paz en la Araucanía

Comité Permanente del Episcopado agradece esfuerzo de Comisión Asesora Presidencial y espera que el Estado pueda «traducir estas propuestas en decisiones y políticas públicas con la urgencia que se requiere. Porque «no puede sufrir nuevas dilaciones el camino de encuentro, justicia, reparación y paz en la Araucanía».

 

El Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de Chile, en una declaración pública, agradeció al obispo de Temuco, Mons. Héctor Vargas, y a cada uno de los integrantes de la Comisión Asesora Presidencial para la Araucanía, que él encabezó, y cuyo Informe Conclusivo fue entregado este lunes a la Presidenta de la República junto a varios ministros de Estado en el palacio de La Moneda.

Los obispos agradecieron también a los diversos actores sociales que han apoyado el esfuerzo de diálogo y de búsqueda del bien común con presencia activa de representantes de la propia región involucrada. «Valoramos positivamente que los acuerdos y propuestas de la Comisión hayan sido consecuencia de un largo y profundo diálogo entre todas las partes interesadas».

La nota de los Obispos destaca tres aspectos relevantes que la Comisión Asesora Presidencial invita a abordar: la realidad histórica del Pueblo Mapuche, el dramático sufrimiento de las víctimas de la violencia rural –que ha llegado al extremo de quemar viviendas y templos de diversas confesiones cristianas-, y la grave realidad de pobreza en la región.

A juicio del Comité Permanente, el Informe recoge «una realidad de injusticia, postergación y violencia que la Iglesia ha venido denunciando y acompañando a través de años de misión evangelizadora y de servicio en la zona, desde los primeros misioneros hasta hoy, en la presencia de las Iglesias diocesanas y de las congregaciones religiosas desplegadas en la región».

Recordando anteriores documentos de Obispos del Sur del país, aseguran que «la falta de diálogo arriesga más exclusión, pobreza y violencia».

«Con la urgencia que se requiere»

El Comité Permanente del Episcopado manifiesta que «esta instancia de diálogo creada por el Gobierno ha significado un gran paso, y confirma que la búsqueda de acuerdos fundada en el respeto a las personas, la amistad cívica y el diálogo, es un valor a cuidar y fortalecer, pues enriquece a nuestra sociedad».

Finalmente, los Obispos esperan que el Estado de Chile pueda «traducir estas propuestas en decisiones y políticas públicas con la urgencia que se requiere. Estamos ciertos de que la sociedad en su conjunto apoyará este esfuerzo. Por el bien de nuestros pueblos originarios, de quienes han sufrido el despojo y la violencia, y de todos los habitantes de la región, no puede sufrir nuevas dilaciones el camino de encuentro, justicia, reparación y paz en la Araucanía».

 

Justicia, reparación y paz en la Araucanía

Fecha: 24/01/2017

Referencia: 22 / 2017

País: Chile

Ciudad: Santiago

Autor: El Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de Chile

 

  1. En las últimas horas la Presidenta de la República ha recibido el Informe que contiene las conclusiones del trabajo realizado por la Comisión Asesora Presidencial para la Araucanía, instancia encabezada por Mons. Héctor Vargas, obispo de Temuco.

    2. Agradecemos a Mons. Héctor Vargas, a cada uno de los integrantes de esta Comisión, y a los diversos actores sociales que han apoyado el esfuerzo de diálogo y de búsqueda del bien común con presencia activa de representantes de la propia región involucrada. Valoramos positivamente que los acuerdos y propuestas de la Comisión hayan sido consecuencia de un largo y profundo diálogo entre todas las partes interesadas.

    3. La realidad histórica del Pueblo Mapuche, el dramático sufrimiento de las víctimas de la violencia rural –que ha llegado al extremo de quemar viviendas y templos de diversas confesiones cristianas-, y la grave realidad de pobreza en la región, son tres aspectos relevantes que la Comisión invita a abordar. El Informe recoge una realidad de injusticia, postergación y violencia que la Iglesia ha venido denunciando y acompañando a través de años de misión evangelizadora y de servicio en la zona, desde los primeros misioneros hasta hoy, en la presencia de las Iglesias diocesanas y de las congregaciones religiosas desplegadas en la región.

    4. Como han señalado los Obispos del Sur del país en los últimos años, la falta de diálogo arriesga más exclusión, pobreza y violencia. Esta instancia de diálogo creada por el Gobierno ha significado un gran paso, y confirma que la búsqueda de acuerdos fundada en el respeto a las personas, la amistad cívica y el diálogo, es un valor a cuidar y fortalecer, pues enriquece a nuestra sociedad.

    5. Esperamos que el Estado de Chile pueda traducir estas propuestas en decisiones y políticas públicas con la urgencia que se requiere. Estamos ciertos de que la sociedad en su conjunto apoyará este esfuerzo. Por el bien de nuestros pueblos originarios, de quienes han sufrido el despojo y la violencia, y de todos los habitantes de la región, no puede sufrir nuevas dilaciones el camino de encuentro, justicia, reparación y paz en la Araucanía.

    6. A la Virgen del Carmen, Reina y Madre de Chile, confiamos la maternal protección de esta iniciativa. Ella acompañará los anhelos y sueños de justicia, paz y prosperidad de la querida región de la Araucanía.

EL COMITÉ PERMANENTE DE LA CONFERENCIA EPISCOPAL DE CHILE

+ Santiago Silva Retamales
Obispo Castrense
Presidente

+ Cristián Contreras Villarroel
Obispo de Melipilla
Vice presidente

+ Ricardo Cardenal Ezzati Andrello
Arzobispo de Santiago

+ Juan Ignacio González Errázuriz
Obispo de San Bernardo

+ Fernando Ramos Pérez
Obispo Auxiliar de Santiago
Secretario General