Diócesis de Temuco
Efectuó un llamado para que a los pueblos originarios se les dé la justicia que merecen y que hace tanto tiempo están esperando.
El obispo de la Diócesis San José de Temuco, monseñor Héctor Vargas Bastidas, junto a 8 Lonkos de distintas comunidades de Ercilla e integrantes de la comunidad estudiantil del colegio San Francisco de Asís de esa comuna, celebraron la llegada del Nuevo Año Mapuche.
Fue así, que el obispo señaló: “Quiero celebrar junto a toda la comunidad , la salida del sol que viene de lo alto y que es enviado por Dios, ngenechen, para renovar nuestra tierra, nuestra naturaleza, darle gracias a nuestros pueblos originarios, porque la vedad si no fuera por ellos no sabríamos descubrir el verdadero valor que tiene la naturaleza, necesitamos el aporte de nuestros pueblo originarios para volver a vivir más humanamente, nos hemos deshumanizado de mil formas, hoy todo se comprar todo se vende, hemos perdido la capacidad de vivir de lo que es gratuito, ngenechen nos ha regalado una naturaleza hermosa, maravillosa y no nos cobró nada por eso, nos regaló el universo, la tierra, el sol, el agua, para poder compartirla entre todos como hermanos y donde no nos falte lo necesario para nuestra supervivencia. Hay valores tan hermosos en los pueblos originarios y esos valores son prácticamente los mismos que están en el evangelio, por eso hay una relación tan grande entre el evangelio y los pueblos originarios, por eso y más les damos gracias a Dios, por su aporte, por toda la riqueza (…) la sociedad a porrazos ha ido tomando conciencia de esto, pidámosle también a gnenechen que ha nuestros pueblos originarios se les dé la justicia que merecen y hace tanto tiempo están esperando, para que efectivamente sus nobles causas sean acogidas por toda nuestra sociedad, así que en este renacer Dios renueve a nuestra naturaleza y sobre todo a nuestra humanidad”.
Durante la jornada, que se efectuó en dependencias de dicho establecimiento educacional de la congregación franciscana, Paulo Palma, ingeniero forestal del Departamento de Acción Social del Obispado de Temuco, trató sobre el agua, el cuidado y uso responsable de este valioso recurso hídrico. Quien a través de una pedagógica exposición, planteó a los estudiantes y asistentes en general, la problemática realidad de hoy en día en la región, las consecuencias de sus escasez y las pequeñas contribuciones que cada uno puede hacer para ayudar de algún modo a no desperdiciar este valioso recurso.
Posteriormente, se realizó la puesta en escena de diversos bailes de pueblos originarios del país y la rogativa a cargo de la machi alrededor del rehue.
La hemana Isabel Monje, directora del colegio San Francisco de Ercilla, manifestó: “ En esta comunidad educativa hace muchos que años que celebramos el we tripantu, para nosotros es muy importante valorar las tradiciones mapuches, aquí tenemos un 85% de estudiantes mapuche y estamos muy contentos de que hoy en día nos acompañen tantos apoderados de distintas comunidades de Ercilla”.
Un grupo de Lonkos, manifestaron su sentir respecto a esta celebración, destacando su gratitud al colegio por la labor que se realiza y el we tripantu, señalaron estar muy emocionados dado que en diversas comunidades no pudieron celebrarlo, porque han sido víctimas de la quema de sus capillas, maquinarias, por lo que hay un clima muy tenso y se están realizando en distintos sectores trabajos de investigación para determinar las causas.
Al finalizar, se efectuó un mizawun, que es un compartir fraterno.
Cabe destacar, que en muchas comunas de la Diócesis San José de Temuco, celebraron we tripantu, entre ellas en el colegio San Francisco y Liceo Técnico Profesional Guacolda de Chol Chol, además señalar la realización del Cabildo en la parroquia Nuestra Señora del Carmen, para abordar la guía para el diálogo sobre la Constitución para Chile.
